Comidas económicas

Todo el mundo ha notado últimamente el aumento del precio de los comestibles. Probablemente algunas familias se preguntan cómo pueden permitirse comprar alimentos nutritivos para su familia sin salirse del presupuesto. Hay un par de trucos y consejos para ahorrar dinero y hacer que tus compras duren más. Las finanzas son un factor de estrés común para todo el mundo, tanto si se trata de una familia monoparental como de un hogar biparental. Comprar alimentos y alimentar a los hijos no debería ser una parte importante de ese estrés. Esperemos que con estos consejos podamos aliviar parte del estrés.

 

    • Intenta seguir un plan. Hacer la compra con un plan de comidas en mente o por escrito puede ayudar a reducir el exceso de compras o la adquisición de artículos que no se necesitan. Tanto si haces la compra semanal como quincenalmente, intenta ceñirte a un plan de comidas para todas las comidas. Si tus hijos van al colegio y toman almuerzos calientes, sólo tendrás que preocuparte de los almuerzos de los adultos de la familia.

    • Cuando estén disponibles, compre marcas genéricas. Suelen ser más baratos y casi siempre de la misma calidad que los de marca. Cuando puedo, compro casi exclusivamente productos de marca. Cuando los presupuestos son ajustados, se observa una diferencia de precio significativa entre los genéricos y los de marca.

    • Compre al por mayor. Aunque parezca que va a costar más, comprar a granel suele suponer un ahorro. En la compra a granel de productos no perecederos y de papel es donde se notará ese ahorro. Algunos buenos artículos para comprar a granel son el papel higiénico, las toallas de papel, los productos enlatados, las pastas o el arroz.

    • ¡Usa cupones! Los cupones se pueden encontrar en el periódico semanal, en los anuncios que llegan por correo o, a menudo, en los propios supermercados.

    • Esté atento a las rebajas y ofertas especiales y esté abierto a comprar en más de una tienda. A veces, las tiendas tienen mejores ofertas en productos agrícolas, carnes u otros artículos. Puede que merezca la pena hacer una segunda parada para ahorrar a largo plazo.

    • Tienda en línea. Esto podría eliminar la opción de añadir artículos innecesarios a su tarjeta de compra mientras camina por el pasillo. Coger lo que tienes en la lista y simplemente recogerlo elimina el riesgo de coger artículos al azar y gastar mucho más de lo necesario. Hay varias aplicaciones y tiendas que te permiten hacerlo.

    • Compra muchas frutas y verduras congeladas. A menudo están de oferta y son más baratos que los frescos. Así tendrás siempre a mano alimentos nutritivos. Las frutas y verduras congeladas suelen tener el mismo valor nutritivo que las frescas.

    • Planifica las sobras. Duplica las recetas al cocinar y congela las sobras para sacarlas otro día.

 

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