Cocinar con su hijo: Cómo ayuda a su desarrollo
Su hijo puede tomar el control de su aprendizaje a través de experiencias prácticas. Aprenda cómo la cocina puede estimular el desarrollo social, físico y cognitivo de su hijo.
Desarrollo social y emocional:
Los niños pequeños pueden practicar habilidades como resolver problemas, compartir y trabajar en equipo. Los niños aprenden el valor de seguir instrucciones y ser conscientes de quienes les rodean elaborando y siguiendo recetas en equipo. El niño experimentará sentimientos de orgullo, confianza y un aumento de su autoestima cuando complete con éxito una receta.
Desarrollo físico:
Los niños utilizan constantemente su motricidad fina y su coordinación mano-ojo cuando cocinan. Las actividades que los niños pueden practicar incluyen mezclar, prensar, extender, amasar, agitar, triturar, rasgar, ¡y mucho más! Por ejemplo, puede ser exprimir un limón o untar un trozo de pan con gelatina. Pon música y baila para añadir más movimiento.
Desarrollo cognitivo:
Los niños aprenden a medir, secuenciar, y causa y efecto a través de los procesos de la cocina. Los niños aprenderán, por ejemplo, que cometer errores es un aspecto normal de la cocina. Cocinar animará a los niños a ser creativos.
Lo más importante que debes recordar es divertirte durante estas experiencias de aprendizaje con tu hijo pequeño. Echa un vistazo al siguiente enlace para ver recetas aptas para niños pequeños.